martes, 27 de agosto de 2013

Características del Bebé de 6 a 9 meses


Características del Bebé de 6 a 9 meses

Una etapa de cambios sorprendentes

En esta etapa el bebé se vuelve más autónomo. Controla más sus movimientos y empieza a realizar nuevas posturas, ensayar gestos y posiciones, lo que le servirá de entrenamiento para dar sus primeros pasos en la siguiente etapa. ¡Disfruta cada momento!

Después de todo este tiempo juntos seguro sabrás qué necesita tu bebé en cada momento. Pero cada etapa abre una puerta a nuevos cuidados y necesidades. Recuerda que cada bebé es un mundo. ¡Nadie mejor que tú para conocer a tu hijo!

A medida que su bebé crece, es apasionante ver todos los cambios del desarrollo que empiezan a perfilarse. Tal vez note que se esfuerza más por hacer cosas solo, por ejemplo, gatear, aplaudir, agarrarse de objetos, balbucear y tratar de pararse. En esta etapa de la vida usted podrá jugar con su bebé a un nivel totalmente diferente y verá cómo se expande su mente. Como siempre, es importante recordar que cada niño se desarrolla a un ritmo único, así que trate de ser paciente y comprensivo(a) mientras su hijo comienza a explorar el mundo de su alrededor.

Comodidad para bebés que quieren recorrerlo todo… anímalo a caminar ¡cuidando siempre sus pies!


Con esta edad el bebé todavía no camina. Pero aun así, es muy importante ayudarle en sus movimientos que, poco a poco, evolucionarán del gateo a sus primeros pasitos en etapas posteriores. Por ello, es fundamental prestar atención al desarrollo de sus pies, proporcionándole el calzado adecuado y motivándole con ejercicios para su estimulación.

Mientras que en el primer semestre de vida del bebé, los zapatos eran elementos más bien decorativos y de protección contra el frío y la humedad, es a partir de los 7 meses cuando el calzado adquiere mayor importancia. El bebé empieza a desplazarse y dar sus primeros pasos. Un buen calzado le ayudará a hacerlo con seguridad, y a darle estabilidad en el inicio de la marcha.

          Pero antes, es importante estimularle a gatear descalzo en casa, en la arena de la playa, sobre el césped del jardín.... ya que ello favorece el conocimiento de su propio cuerpo y le ayuda a mejorar su equilibrio, desarrollar los músculos, la formación del arco del pie y la circulación. En definitiva, a prepararse para dar sus primeros pasos.


Algunos consejos sobre el calzado

  • Un buen calzado es aquel con el que el niño se siente cómodo.
  • Debe ser ligero, flexible y un poco más largo y ancho que su pie, para evitar rozaduras.
  • Elige materiales de fibras naturales, piel o lona, ya que favorecen la transpiración.
  • Que se adapte sin oprimir y le proporciones confort térmico.
  • Opta por los de punta redonda y cerrada, con espacio de sobra para sus dedos. Mejor si la punta está reforzada por si se pone de puntillas.
  • Que se puedan adaptar al pie con cordones, hebillas o velcro, sobre todo en la parte del tobillo (las chanclas y los zuecos por ejemplo no están diseñados para caminar).
  • Es importante que la suela sea antideslizante y con dibujos que aseguren un buen agarre, además de ser fina y blanda para que amortigüe y aporte flexibilidad.
  • Los refuerzos y costuras interiores pueden producir rozaduras, por lo que mejor si están forrados.
  • Para la etapa de gateo, la parte posterior debe estar reforzada sin ser demasiado rígida, para darle estabilidad en sus primeros pasos.
  • Puede que al principio no distingas el derecho del izquierdo, ¡es normal, los zapatos para bebés apenas tienen forma!

Cambios a tener en cuenta


Sueño:

Pasado el sexto mes, lo habitual es que el bebé ya tenga un ritmo de sueño constante, de unas 11 o 12 horas durante la noche. No todos los bebés son iguales, por eso tendrás que respetar el ritmo del tuyo, y es muy frecuente que a esta edad se siga despertando una o más veces.

Pequeñas molestias de esta etapa El sueño nocturno

Pese a que la mayoría de los bebés ya tienen un sueño bastante regular a esta edad, hay algunos a los que les sucede lo contrario. Si a tu bebé le cuesta conciliar el sueño o dormir seguido, si se despierta o llora a menudo, comprueba que se encuentre bien y no tenga frío ni calor... Por tu parte, puedes favorecer su rutina del sueño: respeta los horarios, léele un cuento o cántale una canción, y llévale a su cuna con su peluche y su chupón (en caso de que use)... También puedes probar con alguna leche especial o infusión que favorezca el sueño. Aunque no es fácil, mantener siempre la misma rutina le ayudará a relajarse y a dormir mejor.

Higiene:

¿Tu bebé ya tiene algún diente? Entonces empieza a limpiárselo con un cepillo dental mojado sólo en agua. Si tu bebé es un niño, préstale especial atención a la fimosis ( La fimosis es la imposibilidad de retraer la piel del prepucio).  Durante el primer año de vida se considera normal, por lo que no debes hacer nada ya que la piel está muy ajustada y podría dañarse si le tocas. Con limpiarle de forma superficial, ¡es más que suficiente!





Juegos:

Tras pasarse los primeros seis meses jugando con su cuerpo, a partir de ahora tu bebé se interesará por los objetos. Colores y formas le atraerán mucho más que antes, cogerá las cosas, las mirará, manipulará... cada día con mayor destreza. Elige juguetes que se adapten a las características físicas y a la edad de tu bebé, que ayuden a potenciar sus sentidos, y fomenten el aprendizaje motor y la capacidad de imitación.





Prevención de accidentes:

Tu bebé gatea, se mueve o incluso empieza a levantarse y... ¡encima es muy curioso! Préstale mucha atención y no lo dejes sin vigilancia, por muy segura que te parezca la estancia.


Evita que agarre objetos muy pequeños:

Podría tragárselos o metérselos en la nariz u oídos. Como cada vez tu hijo se moverá más, tendrás que evitar que gatee o camine con objetos en la boca, y despejar la zona de figuritas y otros elementos de decoración. Protege enchufes y asegúrate de que los cables estén en buenas condiciones.


Extrema las precauciones en la cocina:

Si te llevas el bebé contigo a la cocina para controlarlo, no cocines nunca con tu bebé en brazos, usa los fogones más inaccesibles y coloca los mangos de las sartenes hacia dentro. En el baño, pon en alto productos de limpieza y medicamentos, mantén siempre el suelo seco y deja la tapa del inodoro cerrada para evitar accidentes. La norma básica es: nunca dejes a tu hijo sin vigilancia. ¡Mas vale prevenir que lamentar!

Consultas con el pediatra

A medida que el bebé crece, las consultas con el pediatra se espacian en el tiempo. Los controles van evolucionando también para valorar otros aspectos de cada nueva etapa, y, aunque cada bebé tiene su ritmo, te sorprenderá conocer todos aquellos hitos que debe ir superando. Y ya sabes, cualquier duda ¡tu pediatra te la resolverá


Examen físico

Como es habitual en cada visita, el pediatra medirá, pesará y tomará las medidas del perímetro craneal y fontanelas de tu bebé. También controlará su visión, su oído y las caderas. En los niños, también revisará la presencia de los testículos.




Evaluación del desarrollo



       El Test de Denver es el método que aplica el pediatra para medir el desarrollo psicomotor de tu bebé: reflejos primitivos, tono muscular, y su estado general.


Vacunas

El pediatra suministrará las vacunas correspondientes al calendario de tu Comunidad Autónoma. Ver imagen con el calendario de vacunación en Venezuela.



Dientes y dolor de encías

El sexto mes marca el inicio de la salida de los primeros dientes. Esto puede provocar molestias debido a la inflamación de las encías, lo que provoca una mayor salvación, es decir, que tenga más baba de la habitual así como la necesidad de llevárselo todo a la boca, cosa que seguramente le alivia. ¿Cómo ayudarle? Dale mordedores fríos y, si el pediatra te lo aconseja, puedes aplicarle alguna crema específica sobre las encías si el dolor es muy agudo, incluso algún analgésico oral, pero siempre baja prescripción médica.


Estreñimiento

La introducción de nuevos alimentos puede provocar un cambio en los hábitos intestinales del bebé. Si es así, es recomendable darle más fibra(puedes usar para ello papillas de cereales integrales), utilizar fórmulas infantiles tipo AE, y limitar el consumo de alimentos que provocan heces duras (astringentes) como el plátano, la manzana sin piel, la zanahoria o el arroz. También puedes ayudar a tu bebé dándole masajes.

Pérdida De Apetito

La introducción de nuevos alimentos puede comportar una pérdida de apetito. Nuevos sabores y texturas son a veces cambios demasiado grandes que hacen que algunos niños dejen de comer o pierdan el interés por la comida. No es adecuado forzarlo, pero si a tu hijo le cuesta aceptar un nuevo alimento no pierdas la paciencia e insiste, ya que suele ser necesario ofrecerlo varias veces para que se acostumbre a sus características. En los bebés con poco apetito, una alternativa para ayudar a complementar su dieta son las papillas con un aporte elevado de energía y proteínas.


¿Qué puedes hacer?


  • Presentar los platos y alimentos de forma apetecible y divertida. Si le gusta a tu bebé, será más fácil que los incorpore a su dieta.
  • Que la papilla tenga un buen sabor, olor y textura. Conseguirás que tu bebé se sienta atraído por ella.
  • Si además es cremosa, homogénea y suave, tu bebé no podrá resistirse. Para ello, opta por papillas dextrinadas.

Como siempre, en algunos bebés será más fácil introducir nuevos alimentos que en otros. El único truco que funciona es... la paciencia ¡Hazte con buenas reservas y lo demás pronto llegará!

Para más información, consulta con tu pediatra.


Fuente:

http://www.ordesa.es


martes, 20 de agosto de 2013

El Masaje Infantil para el Bebé


     El masaje infantil es una antigua tradición en muchas culturas del mundo que ha sido redescubierta en Occidente. Es una forma de establecer un contacto afectivo entre los bebés y sus padres fortaleciendo así su vínculo. Es el arte de la comunicación a través de las manos, las miradas, las sonrisas, y el contacto, entre padres y bebé.


Beneficios del masaje infantil para el bebé
  • Ayuda a regular y reforzar las funciones respiratoria, circulatoria y gastrointestinal, solucionando a través de la estimulación, las incomodidades producidas por cólicos, gases y estreñimiento.
  • Estimula el sistema diurético del niño.
  • Estimula el sistema inmunológico y propicia un mejor desarrollo del sistema nervioso, si el niño se siente querido y respetado suben las defensas.
  • Regula la musculatura, las distensiones y las tensiones del cuerpo, ayuda al niño a relajarse y lo alivia del estrés que produce encontrarse diariamente con cosas nuevas. Mediante técnicas especificas, se ayuda a los bebés a descubrir las tensiones que se producen en su cuerpo y a relajarse en respuesta al placer de las caricias, brindando un bienestar y equilibrio al bebe, bajando los niveles de ansiedad.
  • Ayuda mucho a la psicomotricidad del niño.
  • Ayuda a reducir a hipersensibilidad al tacto.
  • Mejora el sistema corporal, la conciencia de su ser de sus limites, de su energía interna y la imagen corporal de si mismo.
  • El masaje calma a los bebés cuando están incómodos o molestos.
  • Intensifica la comunicación afectiva entre el bebé y las personas de su entorno, ampliando el vinculo afectivo padres-bebes, facilitan la comunicación no verbal, la escucha mutua e incrementa el apego y los lazos padres-hijos.
  • El masaje mejora los patrones de sueño, ayudando a algunos bebés a dormir más profundamente y durante más tiempo.
  • Facilita la liberación de emociones del bebe.
     
Beneficios del masaje infantil para los padres
Razones para que estos sean los que den el masaje  a sus hijos
  • Dar el masaje calma a los padres.
  • Ayuda a regular y reforzar las funciones respiratorias, dando a los padres más conciencia corporal.
  • Las técnicas de relajación, bajan el estrés de los padres y le da conciencia corporal.
    Intensifica la comunicación afectiva entre los padres y el bebe.
  • Ampliando el vínculo afectivo padres-bebes. Si no existe lo crea.
  • Favorece el instinto materno y paterno.
  • Favorece la intuición de los padres.
  • Favorece el respeto mutuo, de los padres a los niños y de los niños a los padres.
  • Favorece la conexión y la complicidad entre los padres y el niño.
  • Facilitan la comunicación mutua.
  • Facilitan la comunicación no verbal.
  • Facilita la escucha mutua.
  • Enseña a los padres a tolerar las expresiones emocionales del hijo.
  • Facilita la seguridad de los padres como padres. La integración conseguida con el hijo, incrementa la confianza de los padres. Aumenta la autoestima.
  • Mejora los patrones del sueño del bebe, ayudando a los padres a dormir más tranquilos y durante más tiempo.
  • Ayuda a las madres con la depresión postparto.
  • El padre encuentra un rol favorecido.
  • Ayuda a evolucionar el amor y el cariño entre la familia porque se trabaja de corazón a corazón